Según Garofalo [1], la bronquiolitis afecta al sexo masculino en un 68% de los casos llegando al 90% en casos graves. Un 30% de los niños tienen familiares con historia de asma. La edad de los niños afectados generalmente oscila entre los 7 y 14 meses y siendo más grave por debajo de los 7 meses.
Se consideran grupos de riesgo para padecer bronquiolitis además de los niños menores de 6 meses de edad (principalmente aquellos nacidos en los primeros meses de epidemia del VRS), los niños con enfermedad pulmonar de base como broncodisplasia, los prematuros nacidos antes de 35 semanas de edad gestacional, los niños con cardiopatía hemodinámicamente significativa y finalmente los inmunocomprometidos (inmunodeficiencia combinada severa, leucemia, transplantados medulares o pulmonares). Dentro de otros grupos de edad, aquellos pacientes institucionalizados, los afectos de asma moderado-severo y las personas mayores con enfermedad pulmonar crónica presentan una mayor incidencia de infección por VRS [2-4]
Se ha descrito mayor prevalencia de ingresos por la enfermedad en población de raza no caucásica. Las variables a las que pueda estar asociado serán cuestión de estudio. [5]
Las bronquiolitis presentan un claro patrón estacional, relativamente constante, con epidemias que duran de 3 a 5 meses. Estas epidemias se han descrito en España desde finales de otoño, abarcando los meses invernales, hasta el inicio de la primavera [5,6]. Pueden existir variaciones anuales y geográficas, en cuanto al momento de comienzo de la epidemia y su duración, como evidencian diferentes estudios de distintos ámbitos geográficos [7-10]. Así, en los países tropicales la prevalencia se centra en la estación calurosa de las lluvias [11, 12]. Esto se atribuye en parte al hacinamiento producido en la búsqueda de refugio durante las mismas. Un mayor conocimiento sobre la variación anual del momento de presentación de las epidemias, ayudaría a planificar mejor las estrategias preventivas y asistenciales.
Se describe un intervalo corto entre picos epidémicos (7 a 12 meses) y otro intervalo largo (13 a 15 meses). El pico epidémico corto se asocia a incremento de ingresos por bronquiolitis y neumonías [1]. De los dos tipos de VRS, el A produce epidemias todos los años y tiene más virulencia, mientras el B es responsable de epidemias cada 2 ó 3 años. Al ser el genoma del virus lineal y no segmentado, no experimenta las mutaciones antigénicas que ocurren en el virus de la gripe [13].
REFERENCIAS
1. Garofalo RP, Hintz KH, Hill V, Patti J, Ogra PL, Welliver RC, Sr. A comparison of epidemiologic and immunologic features of bronchiolitis caused by influenza virus and respiratory syncytial virus. J Med Virol 2005,75:282-289.
2. Boyce TG, Mellen BG, Mitchel EF, Jr., Wright PF, Griffin MR. Rates of hospitalization for respiratory syncytial virus infection among children in medicaid. J Pediatr 2000,137:865-870.
3. Simoes EA. Environmental and demographic risk factors for respiratory syncytial virus lower respiratory tract disease. J Pediatr 2003,143:S118-126.
4. Falsey AR, Hennessey PA, Formica MA, Cox C, Walsh EE. Respiratory syncytial virus infection in elderly and high-risk adults. N Engl J Med 2005,352:1749-1759.
5. Alonso A, Andres JM, Garmendia JR, Diez I, Gil JM, Ardura J. Bronchiolitis due to respiratory syncytial virus in hospitalized children: a study of seasonal rhythm. Acta Paediatr. 2007 May;96(5):731-5.
6. Carbonell-Estrany X, Quero Jimenez J. [Guidelines for respiratory syncytial virus prophylaxis. An update]. An Esp Pediatr 2002,56:334-336.
7. Mullins JA, Lamonte AC, Bresee JS, Anderson LJ. Substantial variability in community respiratory syncytial virus season timing. Pediatr Infect Dis J 2003,22:857-862.
8. J Artieda MB, I Ozkoidi, S Fuentes. Epidemiología de la bronquiolitis en Guipuzcoa. Boletín epidemiológico de la comunidad autónoma del País Vasco.
9. Grimpel E. Epidémiologie de la bronchiolite du norrison en France. Arch Pédiatr 2001,8:83-92.
10. G Cabrera Roca FDO, B Lafarga Capuz , J Calvo Rosales . Estudio clínico-epidemiológico de la infección por virus respiratorio sincitial en el lactante.; 1997:576-580.
11. Simoes EA. Respiratory syncytial virus infection. Lancet 1999,354:847-852.
12. Stevens TP, Hall CB. Controversies in palivizumab use. Pediatr Infect Dis J 2004,23:1051-1052.
13. Glezen WP. The changing epidemiology of respiratory syncytial virus and influenza: impetus for new control measures. Pediatr Infect Dis J 2004,23:S202-206.